Ciber-monja
No debe ser fácil llevar la restringida vida de una monja. No puedes salir del convento, ni tener amigos (¡mucho menos novios!), no puedes usar teléfono celular ni maquillaje… Y son muchas las reglas que debes seguir a rajatabla.
Sin embargo, hoy en día, con todas las posibilidades que ofrecen las comunicaciones y la tecnología, algunas de estas reglas pueden volverse un poco difusas. Como en el caso de la monja española María Jesús Galán. ¿Quieres saber qué sucedió?
Hace 10 años, en Toledo, el Monasterio de Santo Domingo de Real, al que pertenecía la hermana María, recibió una computadora. De repente, ¡las monjas podían usar Internet!
Inicialmente las hermanas accedían a la red únicamente para realizar trámites bancarios, y así evitaban viajar a la ciudad. Pero María Jesús quiso dar un paso más. Comenzó por digitalizar los archivos del convento, lo cual fue muy bien recibido por las autoridades y el gobierno de la ciudad.
El siguiente paso que dio la hermana María, como no podía ser de otra manera, fue abrir una cuenta de Facebook. Su seudónimo: Sor Internet. A pesar de no poder hacer amigos personalmente, en la red llegó a tener más de 600.
Esta situación generó un gran revuelo en el convento. Luego de las incesantes quejas de las otras monjas, María, después de 34 años de vida religiosa, fue expulsada. Los verdaderos motivos nunca fueron explicitados, ¿acaso estaban celosas de la cantidad de amigos de la popular Sor Internet?
María se marchó a vivir con su madre, dejó el monasterio… ¡pero no la vida virtual! En la actualidad tiene más de 10000 likes en su página, y día a día recibe gran cantidad de comentarios alentadores de sus amigos de la red.
¿Crees que fue positivo su cambio de “hábito”? Si deseas saber más acerca de todo lo que una monja puede y no puede hacer, no dejes de ver The Sisterhood, LUNES 10 PM MEX / 9 PM COL / 9:30 VEN / 23 HS ARG.