FANATISMO EXTREMO
Adoración a prueba de todo.
¿Cuánto eres capaz de hacer por tu artista favorito? Esperar horas y horas para verlo en vivo o perseguirlo para pedirle un autógrafo son solo unas de las tantas cosas que un fan puede hacer para estar más cerca de su ídolo. Algunos no se conforman con una simple foto o un saludo, y llevan su fanatismo al límite.
Caminar sobre la fina línea entre el fanatismo y la locura puede llevar a actitudes violentas, enfermizas y peligrosas. En la novela Misery, de Stephen King, el fanatismo de la enfermera Annie Wilkes por su escritor favorito, Paul Sheldon, la lleva a encerrarlo en su casa y, para evitar que escape, drogarlo, atarlo y hasta romperle las piernas.
Y no hace falta recurrir a la ficción: la realidad puede ser mucho más impactante. Un caso paradigmático es el de John Hinckley Jr., fanático de Jodie Foster, quien, en 1981, le disparó al presidente de Estados Unidos Ronald Reagan para impresionar a la actriz.
En algunas ocasiones, lo que el fanático quiere no es la atención o el amor de su ídolo sino llegar a ser igual a él. Ese es el caso de Toby Sheldon, quien gastó más de 100 mil dólares en cirugías estéticas para parecerse a Justin Bieber. El fanático, de 33 años de edad, en los últimos cinco años se ha sometido a distintas operaciones: cirugías en su rostro, implantes de cabello, retoques en sus dientes; y, según dice, aun no ha terminado. Pareciera ser que su fanatismo por Justin Bieber se transformó en fanatismo por las cirugías estéticas.
Es muy común encontrar fanáticos con tatuajes en honor a sus ídolos, y con “tatuajes” no nos referimos a uno o dos… Carl McCoid, de 40 años, tiene 22 (¡veintidós!) tatuajes de Miley Cyrus. Y su intención no es solo “tenerla en el cuerpo”: Carl ha estado publicando fotos de sus tatuajes en todas las redes sociales, con la esperanza de que Miley las vea y se ponga en contacto con él.
A un fanático de Tom Felton, el actor de “Harry Potter” que interpreta a Draco Malfoy, se le ocurrió una idea muy original para tener más cerca a su ídolo: ¡adoptarlo! El joven actor recibió una carta de este fan donde le pedía que renunciara a su familia biológica y se mudara con él, y como si esto fuera poco, junto con la carta le enviaba toda la documentación para realizar legalmente la adopción… él solo tenía que firmar y cambiar su nombre a “Draco”.
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Como vemos, a la hora de llamar la atención de sus ídolos, o de parecerse a ellos, los fanáticos son capaces de todo.
Fuente de las imágenes: Nydaily News | Jaguar PS / Shutterstock.com | DFree / Shutterstock.com | Helga Esteb / Shutterstock.com | wikipedia - FBI mug shot of Hinckley in 1981 | Melty Buzz.