Ahora, hasta los países más conservadores se están adhiriendo a la moda inclusiva (sin perder la identidad)

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Inclusiva es una palabra reciente en el mundo de la alta moda, que siempre se ha hecho para las mujeres altas, flacas y occidentales.

Pero hasta países como Paquistán quieren figurar en el escenario hi-fashion sin deshacerse de sus creencias fundamentales. La salida para eso está en valorizar lo que son, abrazando diferentes padrones de belleza.

Pero quedarse en el discurso sirve de nada. Precisamos dejar de usar la diversidad únicamente para fines de marketing y tratar de cambiar realmente algo en la sociedad, dice el director creativo de la marca paquistaní Jeem, Asghar Bokhari.

Y aún completa: La industria de la moda es capaz de definir tendencias. El padrón de belleza está cambiando en todo el mundo, y es la individualidad que nos hace bellos.

Los estilistas paquistaníes quiere mayor inclusión de mujeres plus-size, que son las subrepresentadas y tienen pocas opciones a disposición en las tiendas del país.

Otro paso gigantesco que fue dado por la inclusión de Maavia Malik, el primer modelo transgénero en pisar una pasarela paquistaní.

Entran en estas categorías también mujeres con piel oscura, mujeres más viejas y otras tantas que tienen un formato diferente del padrón.

La diversidad es asunto de moda de todo el mundo, pero no creo que la gente deba culparse por estar relativamente atrasada. Quien crea una imagen, crea también una responsabilidad. Por eso, es necesario tener más cuidado con lo que se crea. Necesito al menos intentar cuestionar algunas normas y presentar algo bien pensado, inteligente, dice la directora creativa Khadija Rehman.

La expectativa es que la tendencia sea capaz de cambiar el pensamiento de las personas, y no sea sólo una moda pasajera.