Mujeres de la Biblia

Algunas de nosotras hemos experimentado lo difícil que es crecer siendo la única hija mujer, rodeada de hermanos varones, soportar sus celos y cuidados excesivos. ¿Buscan protegernos o demostrar su fuerza y virilidad ante otros hombres?

Esa era la historia de Dinah, única hija del patriarca bíblico Jacob. La pobre Dinah tenía 12 (¡doce!) hermanos. ¿Puedes imaginarlo?

La joven, además, tenía un carácter inquieto y curioso. Luego de instalarse con su familia en las afueras de una ciudad, se hizo amiga de unas muchachas que vivían allí, y a menudo se escapaba a visitarlas.

Jacob les había prohibido a sus hijos que se acercaran a aquel pueblo y a las grandes fiestas que allí se llevaban a cabo. Los hijos varones oyeron las advertencias, pero Dinah, como cualquier muchacha adolescente, no estaba dispuesta a perderse la diversión.

Dinah era muy bella, en las fiestas no pasaba desapercibida. En una ocasión “la hija desobediente de Jacob”, como a menudo se la nombra, tuvo la mala idea de coquetear con Siquem, el príncipe de la región. Algunas lecturas indican que Siquem violó a Dinah, sin embargo, como la voz de la mujer casi no era escuchada en esa época, no sabemos a ciencia cierta qué era lo que ella quería.

De todas maneras, que Dinah hubiese accedido o no, no tenía importancia para sus celosos y vengativos hermanos. Tampoco les importó que Siquem se hubiera enamorado de la muchacha y deseara casarse con ella.

Los hijos de Jacob entraron a la ciudad, la saquearon, y no solo mataron a Siquem sino a todos los hombres que vivían allí.

¿Qué crees que habría pasado si Dinah tenía 12 hermanas mujeres? Si quieres conocer más a fondo su historia, mira La Carpa Roja (Red Tent).