¿Y si el mundo fuese gobernado por las mujeres?

Sabemos que a veces ser mujer en este mundo no es tarea fácil. Todavía existen demasiados prejuicios para ser derribados y tenemos que luchar por nuestros derechos.  Aún hoy, cuando una mujer tiene un hijo es costumbre que lleve el apellido de su padre y no el de su madre. Esa y otras convenciones sociales son signos de un sistema patriarcal en el cual prevalece la supremacía del hombre sobre la mujer.

Ahora, ¿Te imaginas un mundo donde las mujeres tengan preferencia en todo? ¿Desde la continuidad de su apellido hasta ocupar los puestos de liderazgo en la sociedad? ¿Dónde los hombres esperen ansiosos que una mujer los elija para pasar la noche? ¿Pues eso ya existe: Has oído alguna vez hablar de la tribu Mosúo?
Es un pueblo chino de aproximadamente 40.000 habitantes que practica un estilo de vida que desafía a la “cultura del patriarcado”. Un matriarcado donde las mujeres son las que mandan. En la cultura de los Mosúo no existe el casamiento tradicional. En cambio se practica el llamado “casamiento itinerante” en el cual una mujer invita a un hombre a pasar la noche con ella, pero lo puede dispensar el día siguiente, caso decida. Funciona así: cada mujer vive sola en su pequeña cabaña y los hombres todos juntos en una casa grande. En la puerta de cada cabaña hay un perchero y todos los hombres usan sombrero. Cuando un hombre visita a una mujer deja su sombrero en el gancho, de esta forma todo el mundo sabe que esa mujer tiene un visitante, y nadie más golpea a su puerta. En el caso de que un mismo sombrero permanezca colgado en la misma puerta significa que hay un sentimiento en el aire, probablemente una pasión.

Con respecto a los hijos, éstos pertenecen a la mujer. Y el hombre, básicamente, no tiene derechos sobre sus descendientes, eso no significa que los hombres sean considerados seres inferiores. Por el contrario, las mujeres los aman y los respetan. La única diferencia es que las personas son libres y las relaciones de las parejas existen mientras haya deseo por ambas partes. Los niños cuando crecen ayudan a sus hermanas a cuidar a sus hijos. En este sentido la figura paterna está más ligada a los tíos que al progenitor.

Otra curiosidad: en el idioma que hablan los Mosúo, no existen palabras correspondientes a “guerra”, “asesinato” o “violación”. Tampoco existen las cadenas. ¿Eso es algo para reflexionar, no?

El matriarcado o “las mujeres al comando”, no es una novedad en el mundo. La verdad es que muchas civilizaciones antiguas ya seguían un sistema de organización en el cual las mujeres detentaban el poder sobre las reglas sociales y las creencias religiosas. Algunas tribus celtas, por ejemplo, idolatraban a la Diosa Madre en lugar de la figura masculina de Dios.

Si en pleno siglo XXI las mujeres todavía necesitan luchar para alcanzar la igualdad de géneros, ¿Imagínate entonces si viviésemos en tiempos bíblicos de figuras como Abraham, Moisés y Jacob? ¿Cómo harían las mujeres para tener voz y libertad en un mundo regido por las reglas brutas y opresoras masculinas? Si quieres saber cómo sería ese mundo no dejes de ver THE RED TENT (La Carpa Roja).

FOTO: Sherry Zhang | Under Creative Commons Licence